Hace un año, de la nada desapareció Diana Piggeonountt Gómez, de 15 años de edad, estudiante de la Prepa Federal Lázaro Cárdenas; un año y cuatro meses antes (3 de febrero del 2017), fue la niña Memfis, de 10 años de edad. La encontraron muerta, luego de que salió de la escuela rumbo a su casa el 14 de noviembre del 2016.
¡No hay culpables, no hay detenidos, se desconoce el rumbo de la investigación de la Procuraduría de Justicia del Estado!
¿Será acaso que la Fiscalía cerró los casos por su ineficiencia?
Una niña asesinada y una jovencita desaparecida, ambos casos indignaron a la sociedad de Tijuana.
Pero se olvidaron, como sucede con la mayoría de las desapariciones y crímenes registrados en esta frontera del Noroeste de México.
A Memffis Marroquín de León, “se la tragó la tierra” el 14 de noviembre del 2016, al caminar entre las inmediaciones del bulevar Fundadores y el fraccionamiento El Rubí, Delegación San Antonio de Los Buenos.
Salió sola de la primaria para ir a su casa. Su mamá denunció de manera tardía la desaparición ante la Procuraduría del Estado. Primero lo hizo en redes sociales e inició una búsqueda de la pequeña.
La comunidad, a través de las redes sociales, decidió salir a la calle y buscarla, pegando o entregando volantes con el rostro sonriente de la pequeña Memfis. Siempre exigiendo justicia.
Hubo promesas de “hacer lo imposible” para encontrarla con vida, sin embargo, pese a los ruegos de su familia y la ayuda de la población, el 3 de febrero la encontraron muerta dentro de una bolsa de plástico para basura. Estaba en un picadero de la colonia Las Cruces, tenía entre seis y ocho semanas de fallecida, según el reporte de la necropsia.
Un crimen atroz de una indefensa niña. Le truncaron sus sueños.
No se sabe por qué la mataron; si fue una o varias las manos perversas, crueles y desalmadas que andan sueltas, buscando tal vez a otras niñas.
Diana Piggeonountt Gómez, cursaba el segundo semestre en la Preparatoria Lázaro Cárdenas, turno vespertino, por las mañanas asistía a clases de natación en la misma institución educativa.
Diana tenía 15 años de edad, el viernes 8 de junio del 2018, salió de su casa alrededor de las 10 de la mañana, rumbo a la Prepa Lázaro Cárdenas, a sus clases de natación.
Desde esa fecha jamás se volvió a saber de ella.
A partir de la denuncia de sus familiares, hubo movilizaciones de estudiantes y directivos de la Prepa Lázaro Cárdenas, llamados a las autoridades para encontrarla y no ha pasado nada, Diana sigue desaparecida.