El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y su esposa, la primera dama de ese país, Jill, encabezaron los honores que se extiende hasta hoy al policía muerto en el Capitolio tras el caos generado por los seguidores del ex mandatario Donal Trump, mientras el Congreso sesionaba la ratificación de la victoria del actual líder de la Casa Blanca.
Desde ayer quedó instalada la capilla ardiente en recuerdo a Brian Sicknick, que tenía 42 años cuando murió el 6 de enero en el ataque al edificio que alberga a los legisladores de Estados Unidos.
El presidente y la primera dama fueron de los primeros en acudir al edificio ayer para recordar al funcionario policial. Las cenizas de Sicknick reposarán hasta el mediodía de hoy en la rotonda del Capitolio, considerada como el corazón del edificio legislativo y lugar de honor para mandatarios, congresistas o jueces fallecidos.